24 marzo 2006

¡No me digas!


Todas las mañanas, de lunes a viernes, a las 8 Antena 3 emite Shin Chan. Suelo ver un fragmento nada más levantarme mientras tomo café con leche.
Tras la lectura de un libro ultramalo, que no citaré para no darle ni un poco de publicidad, empiezo a leer Brooklyn Follies de Paul Auster que comienza con la siguiente frase: “Estaba buscando un sitio tranquilo para morir”.
El fin de semana pasado mis hermanas fueron a esquiar. Con la cámara de fotos grabaron cuatro planos, literalmente cuatro planos, y con esos planos he editado un video. Como los planos eran relativamente largos se pudo hacer algo aparente.

Tenía curiosidad por ver la película Platillos volantes de Óscar Aibar y el lunes la emitieron en Versión Española. Me gustó la película. ¿Y ese final? Curioso cambio de registro. No sabía bien como interpretarlo.
Ayer estuve en Ikea y me regalaron una tableta de chocolate con avellana. Mientras veíamos Mujeres desesperadas dimos cuenta de algunas onzas.
Eva nos invitó a cenar en el Burger King de al lado de su casa con la idea de conseguir otro muñeco de Bob Esponja pero en ese Burger no había una promoción de Bob Esponja. Había una promoción de King Kong. (Van un poco retrasados, ¿no?) Los muñecos de King Kong no son tan buenos como los de Bob Esponja. Ya te digo.

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